¿Qué es la isquemia?
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L&S.- Se denomina «isquemia» al estrés celular causado por la disminución del riego sanguíneo. Eso conlleva falta de oxígeno o hipoxia. También es responsable de una falta de aporte en micronutrientes. Y por supuesto la falta de eliminación de elementos tóxicos como consecuencia del metabolismo. De hecho, sabemos que una de las principales funciones de la sangre es aportar oxígeno y nutrientes a todos los tejidos del cuerpo. Este problema puede producir tal sufrimiento celular, que puede llevar a la muerte del tejido circundante (necrosis).
Proceso celular
Para poder vivir, las células necesitan energía y la toman de dos formas diferentes. Primero a través del oxígeno y segundo, por la fermentación. Ambos son procesos químicos derivados del metabolismo. Si la isquemia es muy grave puede llegar a la anoxia. Significa que los tejidos de esa zona no podrán contar con la energía necesaria para mantenerse vivos y el tejido muere. Cada tejido tiene un nivel diferente de tolerancia a la falta de oxígeno.
Tenemos diferentes tipos de isquemia. Estas son las siguientes: crónica, aguda, renal, miocárdica (angina de pecho), etc. Vamos a ver algunas.
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Crónica
Es la disminución de aporte sanguíneo arterial producido de manera progresiva y gradual. Puede afectar a las extremidades. Sobre todo a las extremidades inferiores. Como consecuencia, disminuye la circulación de la sangre en la zona afectada. Esto va produciéndose de manera gradual.
Cuándo la falta de oxígeno ocurre en los miembros superiores (brazos), puede llegar también a causar problemas de oxigenación de las arterias superiores. Las carótidas. Como consecuencia, puede dar origen a un accidente cerebral.
En la isquemia o falta de oxígeno en las extremidades superiores, se producen dolores articulares y musculares en brazos y sobre todo hombros. Se ha podido comprobar que tan sólo con que el paciente realice movimientos en que estén implicados los músculos y estos necesiten más oxigenación, pueden mostrarse cansados, doloridos, y con otros problemas secundarios relativos a la falta de oxígeno, como en el síndrome de Leriche.
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Aguda
Cuándo de manera repentina se produce la disminución de aporte de oxígeno arterial es cuando se produce la isquemia aguda. Es más frecuente en extremidades inferiores que en extremidades superiores. Esto puede también producirse en otras áreas del cuerpo, como riñones (renal), en el cerebro (infarto agudo cerebral), en una arteria del área cerebral (paraplejia), etc.
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Renal
En este caso concreto, cuándo ocurre en los riñones, se llama también hipoperfusión uni o bilateral. Puede tener su origen en una disminución del volumen sanguíneo total; bien por la redistribución de la sangre o bien por una obstrucción. Generalmente las causas suelen ser: complicaciones quirúrgicas, hemorragia, traumatismo, rabdomiolisis con mioglobinuria, sepsis por gram-negativos, hemorragia posparto, pancreatitis, etc. Puede condicionar una insuficiencia renal aguda por necrosis tubular. En casos de obstrucción unilateral (estenosis renal, embolia, etc.) pueden dar lugar a un agudo o a una atrofia renal (isquemia crónica).
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Miocárdica (Angina de pecho)
La isquemia miocárdica es la disminución del riego en las arterias coronarias que van al corazón. Generalmente se identifica con un dolor en el pecho, con sensación de ahogo. Esto es debido a la poca llegada de oxígeno al corazón. Si la angina se prolonga durante un rato, se produce el infarto o zona necrosada.
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